lunes, 15 de diciembre de 2014

Otra vez

Quiero arrancar
mil capas de arena
estallar millones
de espejos
despertar por primera
vez sin miedo
todo me aterra
el muro se deshace
y otra fuerza aparece
titilante

Me quedo paralizada
el pánico aparece en cuanto se va

Otra fuerza
como la de los animales
y los niños
la verdadera fortaleza
hunde sus raíces en
la fragilidad

Una fuerza
desconocida
sepultada por milenios
murió con el Imperio Romano
las guerras en Grecia
las Cruzadas
la Primera Guerra

Eventos que sólo conocen
la fuerza del miedo
que corre, pero hacia delante

La carne expuesta
la desnudez terrible

La debilidad da ganas
de ser profanada,  
golpeada,
rota y destruida

La mirada débil
que se entrega es
insoportable
en ella hace señales
un amor que no
conoció espacio en la Historia

Ese espacio vacío
no mira a los guerreros
con temor
Al contrario
se encuentra a miles de metros
sobre el nivel del miedo

Esa fuerza
conoce la paciencia del tiempo
Espera sonriendo con la tranquilidad
de una certeza
se sabe más fuerte que miles de ejércitos


Escribo porque su presencia es
insoportable
me quiere entera
sin condiciones

Nos miramos,
hacemos una danza
de movimientos infinitos, espaciales o febriles
avances, retrocesos
Me regala atardeceres
Me regala Madres y Padres
Me regala hermanas
Me regala canciones
que quería escuchar en la radio

Me regala una Felicidad
que no creía para mí
Sus regalos me apabullan
disparan todas las alarmas
No es un esfuerzo el
movimiento que me exige

Mientras tanto
preparo el terreno
intento decorar las habitaciones
antes de su llegada
La espero
sé que está cerca

Su nombre impronunciable
es
confianza
aullido
orgasmo
caricia

La pregunta es y siempre fue la misma
¿sí o no?
El sí lo di antes de tener memoria
antes de poder formularlo
ahora quiero repetirlo
cerrarlo sobre sí mismo
con el movimiento de un exceso
un pliegue


Que entonces el estallido sea
tan fuerte como el nacimiento de una
galaxia o como el sonido de un
cascarón de mariposa
y entonces sí
obedecer para siempre en su mirada
amar para siempre como una llama
dejarme guiar por animales, niños y enfermos
Vivir la locura del Paraíso en la tierra

Contemplar para siempre
el éxtasis de los sublime
Y entonces
no correr más
no correr nunca más


Tomar tu mano
y mover los planetas
hasta encontrar el apoyo
tomar tu mano para no soltarla
nunca y esperar nuevas manos
que repitan el gesto

como el fuego
como el fénix
como el eterno retorno
como la mirada que dice “sí, otra vez”


1 comentario: